Tras el inicio de la guerra en la Franja de Gaza entre Israel y el grupo armado palestino Hamas por el ataque que el grupo perpetuó en suelo israelí el 7 de octubre de 2023, otros grupos que apoyan la causa palestina han mostrado su apoyo a Hamas a través de continuos ataques contra Israel, entre los que destaca Hezbollah, grupo armado que radica en el Líbano y que ha librado guerras contra Israel anteriormente.

Hasta el mes de agosto los enfrentamientos entre ambas partes se habían mantenido en la frontera compartida en donde ambas partes habían evitado el inicio de una guerra, sin embargo, Hezbollah había prometido que no detendría sus ataques hasta que hubiera un alto al fuego en la Franja de Gaza, algo que cada día parece más difícil de conseguir.

Con el conflicto en la Franja de Gaza bajando de intensidad en medio del estancamiento en las negociaciones para una tregua entre Israel y Hamas, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu movilizó sus tropas a la frontera compartida con el Líbano, al norte de Israel, amenazando con abrir un nuevo frente contra Hezbollah, lo que ha generado el miedo de extender la guerra en Medio Oriente y el cuestionamiento sobre si el Líbano tendrá el mismo destino que la Franja de Gaza, donde más de 40,000 personas han muerto y millones de palestinos han sido desplazados por la guerra.

En los últimos días se produjeron decenas de explosiones en diversas ciudades del Líbano que tuvieron como objetivo los miembros de Hezbollah. El grupo responsabilizó a Israel de los atentados y días después el ejército israelí bombardeó la capital libanesa, por lo que Hezbollah anunció que el conflicto había entrado en una "nueva fase", por lo tanto, las esperanzas de encontrar una solución diplomática al conflicto parecen cada vez menores ante los indicios de que ambas partes están dispuestas a iniciar una nueva guerra.

Hasta el momento, Israel no ha anunciado si iniciará una ofensiva militar en el Líbano, pero al parecer eso dependerá de la respuesta que el grupo armado de a los bombardeos israelíes. Asimismo, Netanyahu prometió devolver la calma a la zona norte de Israel para que sus ciudadanos puedan regresar a sus hogares.

El conflicto en el Líbano ha dejado más de 500 muertos y 110,000 personas desplazadas, provocando que el gobierno acondicione escuelas y otros centros para alojarlos en el sur del país. A diferencia de la Franja de Gaza, Israel no tiene control sobre el territorio libanés por lo que organizaciones humanitarias han podido atender a la población afectada y Naciones Unidas garantizó que cuenta alimento suficiente para cubrir las necesidades de los ciudadanos durante meses.

A esto, hay que agregar que uno de los heridos en las explosiones fue el Embajador iraní en el Líbano, por lo que el gobierno de Irán aseguró que tomará las medidas necesarias para responder a la agresión israelí. No obstante, será complicado para el eje iraní y los grupos armados que lo apoyan, encontrar la forma adecuada de contraatacar a Israel sin dar a Netanyahu el pretexto que está buscando para iniciar una nueva guerra.

La escalada del conflicto en el Líbano se da a días de la celebración de la cumbre anual de la Organización de Naciones Unidas, cuyo Secretario General, Antonio Guterres es uno de los principales críticos de Netanyahu y quien lo ha acusado de no respetar el derecho internacional humanitario al no proteger a los civiles y provocar una crisis humanitaria sin precedentes. Además, recientemente la Asamblea General aprobó una resolución propuesta por Palestina para exigir a Israel que salga del territorio palestino y que se le impongan sanciones y, aunque no es vinculante refleja la voluntad de la comunidad internacional.

Adicionalmente, con este nuevo conflicto militar, hay diversos factores que juegan en contra de Netanyahu, a diferencia de los que había cuando inició la guerra en la Franja de Gaza:

• Netanyahu enfrenta una creciente presión internacional y nacional, con las protestas al interior de su país, para que alcance un acuerdo con Hamas, sin embargo, con el fin de la guerra podría venir el fin de su gobierno y el mandatario enfrenta cargos por corrupción, los cuales fueron pausados cuando tomó posesión, por lo que sus juicios aún están pendientes.

• Los Estados aliados que apoyaban a Netanyahu en la guerra contra Hamas han limitado o detenido la venta de armas al gobierno israelí, además de que algunos han condenado la guerra e incluso han reconocido a Palestina como Estado.

• En enero de 2025, Estados Unidos, el principal aliado militar de Israel, cambiará de presidente, con lo que podría modificarse el apoyo que ha recibido hasta el momento.

• El Líbano es un Estado reconocido internacionalmente, a diferencia de Palestina, por lo que podría ser contraproducente para Netanyahu atacar más allá de los miembros de Hezbollah o incluso una invasión.

• Podría finalmente emitirse una orden de arresto por la Corte Penal Internacional por crímenes de guerra contra Netanyahu, lo cual no ha sucedido por las presiones de Estados Unidos.

Secretaría de Asuntos Internacionales

CEN del PRI